Cantando Emociones: programa lúdico-musical para el bienestar emocional y social con personas mayores
Cantando Emociones es un proyecto innovador para incrementar el Bienestar Emocional y Social de personas mayores, diseñado y desarrollado para Fundación FADE.
Este proyecto tiene como protagonista la música, pero trabajada de una forma diferente a como estamos acostumbrados a verla en proyectos de mayores: no es música popular o tradicional, y tampoco es musicoterapia como tal. Se trata de animadas canciones que han sido realizadas desde sólidos planteamientos de Inteligencia Emocional y Social, así como valores humanos y sociales, trabajando al tiempo su letra-mensaje, el ritmo-movimiento, la creatividad, y facilitando la comunicación y reflexión colectiva en torno a las emociones y valores que suscitan.
Estas canciones pertenecen a los proyectos educativos “Emoticantos” y “Educantares”, con más de 10 años de desarrollo en centros educativos de España y América, y formación a docentes sobre su utilidad pedagógica. Dichos proyectos y sus canciones ya se trabajan en muchas aulas de todo el mundo, y forman parte de numerosas investigaciones científicas y artículos sobre la educación y desarrollo emocional.
El hecho de hacer esta transferencia de un proyecto, inicialmente concebido para educación infantil y primaria, no significa caer en una infantilización del mayor: vaya por delante que son adultos, y que como adultos vamos a disfrutar y trabajar unas canciones con mensajes importantes que nos van a ayudar a reflexionar sobre nuestras emociones, sentimientos y valores humanos, que nos van a ayudar a ver la vida en positivo y a vivirla con más sentido.
Al tratarse de canciones pedagógicas ya consolidadas en centros educativos infantiles y de educación primaria, algunas de ellas incorporadas a repertorios y grabaciones de coros infantiles, esto es una buena oportunidad para tratar de buscar vínculos inter-generacionales tipo apadrinamiento, por ejemplo, entre un aula de primaria y un centro residencial de mayores, al compartir las mismas canciones, y esto podría realizarse como actividad on-line: sería muy positivo tanto para los niños y niñas como los y las mayores.
Existen en la actualidad abundantes investigaciones, citadas en la fundamentación científica del diseño de este proyecto, que demuestran los beneficios cognitivos, emocionales y psicológicos que se producen en los mayores de 65 años que de forma pautada y regular participan en actividades musicales activas.
Subrayamos la palabra “activas” para referirnos al rol protagonista y activo que tiene la persona mayor en estas actividades: no es un simple oyente o participante ocasional de alguna actividad, sino más bien un colaborador y participante activo de las mismas, con un rol definido. Aunque se trate incluso de una audición, hay audiciones guiadas con un objetivo que prescriben roles activos desde la atención, la memoria y la escucha, más allá de la mera audición de entretenimiento o celebración.
En todo caso, sí que nos parece conveniente resumir aquí los principios y claves que definen este proyecto, y que son los hilos conductores de la animación del mismo, a partir de las aportaciones de diferentes estudios e investigaciones que hemos consultado acerca del papel de la música en el bienestar emocional y social de los mayores:
1. Atender al paradigma de las fortalezas, desde una propuesta propositiva que ponga el acento en la sabiduría, la experiencia, la realización personal y las ganas de vivir en positivo y disfrutar la vida que les queda por vivir y compartir.
2. Potenciar la natural selección de las experiencias, recuerdos y emociones más gratificantes y positivas, propia de la edad madura, a través de las canciones y actividades que se desarrollen.
3. Orientar el proyecto desde el mayor como protagonista activo del mismo, con un rol activo y creativo en las actividades socio-musicales propuestas, que activen sus recursos y competencias cognitivas, psíquicas, emocionales y psicomotrices.
4. Aprovechar todos los elementos del formato musical de canción: letra, ritmo y movimiento, canto, coreografía, creación, con el fin de estimular las más inteligencias posibles (musical, lingüística, corporal-cinestésica, existencial, intrapersonal e interpersonal).
5. Recalcar la importancia del propósito personal y el sistema de valores, incluido en el capital psíquico del mayor como fuente de gratificación personal, realización, sabiduría y gratitud, que aportan sentido y dignidad a la propia vida, una vida que vale la pena y habrá valido la pena ser vivida.
El constructo de capital psíquico en la vejez, es uno de los más innovadores y que está en proceso de desarrollo en la actualidad: se define como el conjunto de potencialidades, capacidades cognitivas, emocionales, relacionales, habilidades cívicas y sistema de valores que permiten generar fortalezas personales así como aprender a protegerse y sobrevivir. Está muy cercano a otro concepto que conocemos más, que es el de resiliencia, pero desde un enfoque más preventivo, en el sentido que una persona a lo largo de su vida va construyendo reservas emocionales, cognitivas, sociales y morales para épocas de escasez o necesidad, y en este sentido, las actividades conducentes a mantener e incrementar el capital psíquico de nuestros mayores, serán fuente de bienestar y calidad de vida para los mismos en el futuro: se trata por tanto de sembrar las semillas del bienestar emocional y social en nuestros mayores.
Este programa-curso formativo es idóneo para centros residenciales de mayores, entidades sociales que trabajan con mayores, educadores/as especializados en área gerontológica y geriátrica, voluntariado con mayores, así como monitores/as y animadores/as de actividades con nuestros mayores. El mismo incluye como materiales 12 cuadernos didácticos, uno por cada sesión, enlaces a todas las canciones en plataformas de música, así como audios de apoyo al educador-voluntario para cada sesión y podcast de ejemplo de sesiones con mayores.
Más detalles y contacto en este VÍDEO INFORMATIVO.